Foto: Archivo Referencial
El Emprendimiento Corporativo (EC) nació como una estrategia global de innovación organizacional que da luz a los nuevos negocios dentro de las grandes compañías usando técnicas y lógicas operacionales con estrategias de emprendimiento que benefician a ambas partes, lo que permite una equidad y balance de las cargas dentro de dichas empresas.
Uno de los ejemplos de EC del país se realizó en Medellín, una ‘start-up’ o compañía emergente, llamada Estratek que cuenta con un equipo de más de 30 emprendedores corporativos, trabaja de la mano de grandes compañías en Colombia como Corona, Familia, Coninsa, Griffith, XM, Team Foods y Alpina, aportando a su crecimiento y transformación del core business (negocio principal) usando el Emprendimiento Corporativo como vehículo, bajo el modelo de “emprendimiento como servicio” o “start-up as a service”.
“Este es un fenómeno complejo, abstracto y muy amplio que apenas estamos aprendiendo a digerir y a ‘colombianizar’, pero que claramente llegó para quedarse y marcará la hoja de ruta de muchos procesos de innovación en las empresas más grandes del país en el 2020”, asegura Sebastián Castrillón, cofundador de Estratek.
Según cifras del ranking de Innovación Empresarial de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) de 2018, el 43% de las empresas colombianas ven en la innovación un propósito para “garantizar la sostenibilidad y competitividad de la compañía” pero solo el 6% de ellas se relaciona con emprendedores para lograrlo.
Por ello el emprendimiento corporativo, aunque sigue siendo un desafío grande para el sector empresarial colombiano por su grado de novedad y complejidad de implementación en organizaciones maduras con culturas tradicionalistas y pesadas, los empresarios cada vez son más conscientes de la importancia y utilidad de esta estrategia para su crecimiento y sostenibilidad en el mercado.