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El concejo de Bogotá es consiente de la situación de muchos de los ciudadanos, y sus condiciones económicas gracias a la emergencia sanitaria, por esto está en marcha un proyecto liderado por el presidente del Concejo de Bogotá, Carlos Fernando Galán, que busca reducir la tarifa del transporte público, para poder ayudar en cierta parte a la economía de las personas que deben salir todos los días a trabajar, pues se debe tener en cuenta que un ciudadano que se gana un salario mínimo, se gasta al menos el 30% de su salario en transporte público.
Según Galán, con este proyecto se busca garantizar la financiación pública del sistema de transporte que hoy sufre una crisis económica, asimismo, espera asegurar que los ciudadanos de bajos recursos puedan acceder a este servicio a un costo asequible.
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“Este proyecto de acuerdo busca enfrentar un problema que tenemos en dos frentes: por una parte, como garantizar la financiación del transporte público, que hoy tiene un hueco monumental, que se va a aumentar por cuenta de la crisis que estamos viviendo, y en segundo lugar, cómo garantizamos el acceso al ciudadano, en particular al que tiene pocos recursos, porque cada año sube más la tarifa, y es porque este aumento busca llenar el hueco que tenemos en la financiación del transporte público, pero es un precio que afecta al ciudadano” asegura el presidente del Concejo
Ahora bien, una de las soluciones que propone el Presidente del Concejo para solventar el hueco que tiene este sector, son herramientas contempladas en el Plan Nacional de Desarrollo como los cobros por parqueo en vía, por congestión, por contaminación, peajes urbanos, multas, publicidad, arrendamiento de espacios de infraestructura asociada con el sistema, herramientas de captura del valor del suelo, entre otros.
El proyecto, ya pasó el primer debate, con un resultado positivo, sin embargo, aún falta que esta iniciativa pase a un segundo debate, y posteriormente de ser aprobada, será la alcaldesa Claudia López quien determinará si el proyecto se llevaría a cabo o no, teniendo en cuenta que esta decisión podría beneficiar a más de un millón de usuarios diarios del trasporte público.
