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El Gobierno de Colombia está instando a los ciudadanos a evitar las multitudes y celebrar la Navidad solo con su núcleo familiar para evitar la propagación del coronavirus, a medida que hordas de compradores congestionan las zonas comerciales más populares. Sin embargo, la esperada época navideña para lograra una reactivación económica ha dejado ver que la desesperación por recuperar lo perdido en ganancias sobresale ante la prohibición de generar aglomeraciones.
Más de cinco meses de cuarentena estricta hasta agosto para frenar la propagación, fue una de las estrategias que quiso llevar a cabo el Gobierno de Colombia, lo que dio resultados favorables, pues los niveles de contagios bajaron considerablemente en los últimos tres meses, ubicando la cifra de contagios de el mes de diciembre con 1,5 millones de casos confirmados de Covid-19.
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Las medidas de confinamiento provocaron el cierre de negocios y dispararon el desempleo. Por lo que Gobierno ha permitido que la mayoría de las empresas retomen actividades con requisitos de seguridad como máscaras faciales, la toma de temperatura y la desinfección de manos. Sin embargo la polémica de las aglomeraciones por la reactivación se da gracias a los “madrugones” y como tal las ventas en San Victoriono, sector donde crecen exponencialmente las ventas en esta época del año.
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Gracias a información otorgada por la agencia de noticias Reuters, se pueden encontrar algunos testimonios tanto de vendedores como de compradores de este sector.
“Realmente no me preocupo, nosotros salimos confiados, manejamos la bioseguridad desde casa y aquí mismo sabemos dónde comprar, entonces no hay problema por eso”, dijo Víctor García con su rostro cubierto por su mascarilla, mientras se encontraba entre otros compradores en un pasillo estrecho rodeado por percheros de ropa.
Mary Baron vino a comprar al por mayor para su negocio.
“Mientras tengamos el cuidado que nos exigen yo creo que podemos pasar diciembre full, si no nos cuidamos con el tapabocas ni los protocolos del distanciamiento y el lavado de manos, pues sí pueden pasar diferentes cosas, pero confiando en Dios ahí vamos bien”, concluyó.