Duque respondió duramente al anuncio de la ministra de Minas, Irene Vélez, que confirmó que el Gobierno no firmará contratos de exploración de petróleo.
El expresidente Iván Duque se refirió duramente al anuncio que realizó la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, en el que aseguró que el Gobierno del presidente Gustavo Petro no firmará más contratos de exploración de petróleo y gas.
El anuncio lo realizó la funcionaria durante un conversatorio en el Foro Económico Mundial que se desarrolla en Davos, Suiza. Según Vélez, esta es una muestra de la lucha de Colombia frente al cambio climático.
Las palabras generaron polémica y abrieron nuevamente un debate sobre cómo afectará esta decisión a la economía del país a corto, mediano y largo plazo. A esta discusión se sumó el expresidente Iván Duque que aseguró que frenar la exploración de hidrocarburos sería un “suicidio económico y social”.
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“Que Colombia deje de explorar petróleo y gas significa una especia de suicidio económico y social (…) Nuestro país no utiliza petróleo y gas para la producción de electricidad, nuestra materia energética depende del agua”, dijo.
El exmandatario explicó que el país se ha ido adaptando para que cada vez hayan más vehículos eléctricos, por lo que en estos contextos no se sentirían tanto las consecuencias, señaló Duque. Sin embargo, enfatizó que más del 40% de las exportaciones son de petróleo y gas, por lo que se impactaría de manera directa a la economía nacional.
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“El petróleo y el gas son una de las principales fuentes de divisas para nuestro país y no hay productos que puedan sustituir semejante peso en el corto y el mediano plazo. Colombia sí avanza hacia la transición y lo puedo hacer conviviendo con el petróleo y gas, manteniendo sus reservas y por ello se requiere mayor exploración”, señaló
Duque agregó que con esta decisión se está enviando un mensaje equivocado a los inversionistas, lo que generará “incertidumbre, preocupación y una gran salida de capitales de nuestro país”.
“Hay que evitar que esos mensajes se den porque son mensajes equívocos, y nada tienen que ver con la transición energética”, ultimó.
