El programa europeo Al-Invest Verde brindará asistencia técnica al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia (MinCIT) para que siete sectores agroindustriales del país suramericano, como el del café o el cacao, puedan adaptarse a las normativas de la UE y así promover exportaciones “más sostenibles”.
Los productos priorizados son el café, el cacao, el azúcar de caña, el aceite de palma, las flores y las frutas frescas y los ingredientes naturales, al ser cadenas con “altas cuotas de exportación a la UE (Unión Europea)” y que “pueden verse potencialmente afectados por los nuevos reglamentos europeos”, dijo el director del Componente 2 del programa, Emilio Calvo, en el anuncio de la colaboración este jueves en Bogotá.
Entre estos “nuevos reglamentos”, Calvo se refirió a algunos como el recientemente aprobado en materia de productos libres de deforestación con el que se busca frenar la deforestación y degradación forestal causada por la expansión de tierras agrícolas para producir materias primas como el cacao, el café o el aceite de palma.
En el marco de esta acción que busca impulsar la adaptación de los siete sectores agroexportadores al Pacto Verde europeo (estrategia de la UE para alcanzar la neutralidad climática de cara al año 2050), se elaborará un diagnóstico sobre las necesidades y oportunidades de estos y, posteriormente, se diseñarán acciones formativas en materia de sostenibilidad y exportación.
ADECUARSE EN MEDIO DE LA “REINDUSTRIALIZACIÓN”
Convencido de que, “de no cumplirse con los estándares” exigidos, Colombia podría enfrentar una “dificultad económica fundamental” en sus exportaciones a la UE, el viceministro de Comercio Exterior, Luis Felipe Quintero, insistió en la importancia de esta colaboración.
“Los desafíos que plantea el programa europeo” requieren de un “esfuerzo de fortalecimiento institucional y de (una) inversión sustantiva que, muy probablemente, el Estado colombiano no va a poder adelantar solo”, explicó.
Del mismo modo, Quintero hizo referencia a la necesidad de adecuarse a las normativas europeas para mantener el comercio con el bloque y así reemplazar los ingresos derivados de la exportación de carbón y petróleo con los generados de las “exportaciones de bienes y servicios”.
“Si dejamos de exportar petróleo y carbón, paulatinamente, debemos tener la certeza de que los ingresos por balanza de pago son sostenibles y van a ser sostenidos”, precisó el viceministro en relación al programa de reindustrialización sobre el que avanza el país y que tiene a la sostenibilidad como uno de sus pilares fundamentales.
Según los datos mencionados por Quintero, el 60 % del aceite de palma que Colombia exporta al mundo tiene como destino la UE, algo que también sucede con el 30 % y 10 % del café y las flores, respectivamente, que se envían al exterior.
En este sentido, la vicepresidenta de Exportaciones de la agencia gubernamental ProColombia, Juliana Villegas, definió como “esencial” el tránsito del actual sistema alimentario hacia un “modelo sostenible”, tras reivindicar a su país como una nación que se perfila como “potencia en términos de despensa agroalimentaria para el mundo”.
EFE