Los padres de un bebé de siete meses que falleció deshidratado y malnutrido tras ser alimentado con leche vegetal quedaron en libertad condicional, después de que el Tribunal Penal de la ciudad belga de Termonde les condenara a seis meses de prisión exentos de cumplimiento.
“Los padres alimentaron a su hijo de forma inapropiada, causando su muerte sin pretenderlo”, reza la sentencia.
Los padres del bebé habían determinado, sin consultar a un pediatra, que su hijo sufría intolerancia a la lactosa y al gluten, después de que este rechazara tanto los biberones como el pecho de su madre.
Por ello, optaron por alimentarle con leche de avena, de arroz y de quinoa, productos de la tienda de productos naturales que ambos regentaban.
Cuando la salud del pequeño se deterioró, sus progenitores le llevaron al servicio de urgencias del hospital de Hasselt, en el norte de Bélgica, donde los médicos solo pudieron confirmar su fallecimiento por malnutrición y deshidratación.
En el momento de su muerte, el 6 de junio de 2014, el pequeño solo pesaba 4,3 kilos, pese a contar con siete meses de edad, reporta Efe.
La Fiscalía, que pedía 18 meses de cárcel para la pareja, recordó que “ningún médico había diagnosticado al niño intolerancia al gluten o a la lactosa”, mientras que la abogada defensora, Karine Van Meirvenne, pedía la absolución de sus clientes porque éstos no habían deseado en ningún momento la muerte de su hijo.
“Ellos nunca se dieron cuenta de que la situación era preocupante o alarmante”, aseguró la letrada.