El primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, afirmó que la crisis entre Moscú y Washington se debe al “clima repulsivo” que existe en las relaciones bilaterales, y no a algo personal entre los altos cargos de los dos países.
“El problema no son nuestras relaciones personales (con dirigentes de EEUU), aunque estas también son importantes”, dijo el jefe del Ejecutivo ruso en una entrevista con cinco cadenas de televisión rusas.
Medvédev señaló que tiene la impresión de que una serie de políticos estadounidenses quieren resolver sus problemas a costa de Rusia.
“Quieren jugar la carta rusa para influir de esa forma en su presidente”, aseguró.
A la vez indicó que ahora lo que hay que hacer es buscar soluciones a la crisis, y no culpables, reporta Efe.
“La cuestión ahora no es quién tiene la culpa (de la situación actual), sino qué tenemos que hacer para superarla”, recalcó.
