El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, dijo no arrepentirse de haber admirado en el pasado a su antecesor Rafael Correa, pero matizó que rechaza la idea de perpetuarse en el poder.
Moreno participó en una tribuna organizada en la sede de esta institución en Madrid donde repasó varios asuntos de la actualidad de su país.
Preguntado por Correa, de quién fue vicepresidente y ahora está distanciado, Lenín Moreno recurrió a la ironía.
“El criterio de Correa sobre mí ahora no es muy bueno. Yo siempre lo tuve bueno de él. Es posible que los dos estemos equivocados”.
En su primera etapa en la presidencia Correa era “un soñador”, según Moreno, para quien la situación “se vuelve siniestra cuando un presidente decide perpetuarse en el poder”.
“El poder es peligroso”, dijo el mandatario ecuatoriano, que calificó al Correa de la primera etapa de “joven idealista”, antes de añadir que no le gusta que una dictadura pueda disfrazarse de democracia, reporta Efe.
En alusión a la gestión de Correa en su última etapa, Moreno afirmó que “estamos pagando muy caro algunos casos de corrupción”.
“A lo que se ama no se le roba”, aseguro Moreno que sustituyó a Correa en la presidencia de Ecuador en mayo pasado.