Las sanciones económicas de Estados Unidos contra Moscú buscan debilitar las posiciones de Rusia en los mercados de energía y armamento en beneficio propio, denunció el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
“Las sanciones dirigidas contra el sector armamentístico ruso (…) persiguen sin duda el objetivo de impedir el refuerzo de nuestras posiciones en detrimento de las posiciones de EEUU”, dijo Lavrov en su tradicional rueda de prensa para resumir el año que acaba de terminar.
Los deseos de Washington “son comprensibles”, agregó, “pero hay que competir de forma honesta, en lugar de prohibir a los países del tercer mundo comprar productos rusos bajo la amenaza de sanciones”, reporta Efe.
La administración del presidente estadounidense, Donald Trump, “teme aún más” que el gabinete de su antecesor, Barack Obama “una competencia honesta en toda una serie de ámbitos”, entre ellos la energía y particularmente la exportación de gas natural a Europa, señaló Lavrov.
Este temor ha cristalizado en las presiones de Washington a la Unión Europea (UE) para frenar el proyecto del gasoducto “Nord Stream 2”, dijo el ministro ruso.