Ante el aumento habitual de la comercialización y el consumo de pescados y mariscos durante la temporada de Semana Santa, la Secretaría Distrital de Salud (SDS) realiza operativos de inspección y control en los cinco principales centros de abastecimiento y en más de 800 establecimientos de expendio y depósito de la ciudad para verificar que los productos cumplan con las condiciones higiénico sanitarias.
Para prevenir posibles intoxicaciones y enfermedades por causa de alimentos pesqueros y de acuicultura en mal estado, los compradores y consumidores deben asegurarse de que el pescado fresco esté conservado con las temperaturas adecuadas de refrigeración (entre 0°C y 4°C) y de congelación (-18°C). Así mismo, comprobar que los enlatados y el pescado seco estén en óptimas condiciones. No se debe comprar pescado en ventas ambulantes.
Estas son las principales recomendaciones para que los ciudadanos tengan en cuenta al momento de comprar este tipo de productos:
Pescado fresco
- Las escamas deben ser brillantes y estar unidas entre sí.
- La piel debe ser húmeda y tersa, sin laceraciones ni arrugas.
- Los ojos deben ser transparentes, brillantes y salientes.
- El iris de los ojos no debe tener manchas rojas.
- Las branquias deben ser húmedas y brillantes.
- El olor debe ser fresco, no extraño, como el del amoníaco o el óxido.
Pescado seco
- El color debe ser amarillo uniforme.
- No debe tener manchas rojizas o verdosas.
- Debe tener consistencia dura.
- El sabor debe ser salado.
- No debe presentar olor parecido al amoníaco.
Pescado congelado
- Debe estar duro.
- No acepte pescado blando o semicongelado.
- El color de la carne debe ser rosada. La piel, según la especie, puede ser de color oscuro.
- Si el pescado presenta algún olor extraño o similar al amoníaco o al óxido, no lo compre.
Productos enlatados
- El rotulado debe ser claro, visible y fácil de leer.
- El empaque no debe tener enmendaduras, no estar roto, ni en mal estado.
- Debe contener la información mínima como: nombre del alimento, lista de ingredientes, identificación del lote, fecha de vencimiento, instrucciones de conservación y número del registro sanitario.
- Si el producto es importado debe tener rotulado complementario, donde se declare la información del alimento.