El presidente francés, Emmanuel Macron, llamó anoche a Donald Trump para manifestarle su descontento por los aranceles que ha impuesto a las importaciones de acero y aluminio europeas, y decirle que el nacionalismo económico perjudicará a todo el mundo, también a Estados Unidos.
El Elíseo explicó hoy que en esa conversación Macron recordó al presidente estadounidense que la decisión de establecer esos aranceles es “ilegal” porque va contra las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y constituye “un error”, porque el “nacionalismo económico penalizará a todo el mundo, incluidos los Estados Unidos”.
También le subrayó que la Unión Europea (UE) reaccionará con “las medidas apropiadas, de forma firme y proporcionada, en conformidad con las reglas de la OMC”.
Como ya lo hizo el pasado viernes en la apertura de la reunión ministerial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el presidente francés admitió que aunque hay “graves problemas en el comercio internacional”, “el único camino viable” para solucionarlo es “reforzar juntos las reglas” que lo rigen.
A ese respecto, su propuesta es que la UE, Estados Unidos, China y Japón discutan cómo reformar la OMC para agilizar su funcionamiento sin perder su carácter multilateral.
Se trataría en primer lugar, señaló hoy el Elíseo, de reabsorber los excesos de capacidades, encuadrar las subvenciones y proteger mejor la propiedad intelectual.
Macron consideró ayer que EEUU, con sus aranceles al acero y al aluminio importados desde la UE, México y Canadá, responde “de la peor manera”, “fragmentando” y con nacionalismo económico.
Señaló que su predecesor François Mitterrand (1981-1995), en su último discurso ante el Parlamento Europeo, había advertido de que “el nacionalismo es la guerra”: “Es exactamente lo que ocurrió en los años 1930”, concluyó Macron. Efe