A pesar de operar en medio de una marea consecuente de escándalos de corrupción, la agroindustria brasileña guió el crecimiento del producto interior bruto (PIB) del país en el primer trimestre y se reafirma como uno de los pilares para la salida de la recesión, apuntaron hoy especialistas del sector.
Según divulgó el jueves el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), el PIB del país avanzó entre enero y marzo un 1,0 % e interrumpió una racha de ocho trimestres consecutivos en números rojos, dando señales para una recuperación en el balance previsto para 2017.
El principal responsable del crecimiento en el primer trimestre del año fue el sector agropecuario, que presentó un avance del 13,4 %, el mayor salto para el período en los últimos veinte años y que endosa las previsiones para salir de la recesión, tras contracciones en 2015 y 2016 del 3,8 % y 3,6 %, respectivamente.
Para Marcelo Braga, profesor de la Universidad Federal de Viçosa (UFV), especialista en economía agraria y presidente da Sociedad Brasileña de Economía, Administración y Sociología Rural (Sober), el clima, el implemento de tecnología y el crecimiento de las áreas cultivadas favorecieron el resultado positivo.
“Hubo una reducción de precios de las materias primas agrícolas, pero este es un fenómeno histórico frecuente. Nuestra productividad detiene la caída del precio y en mi evaluación con estos números es bien positiva”, destacó Braga en diálogo con Efe.
De acuerdo con el especialista, la agricultura brasileña es muy competitiva “dentro del portón”, pero presenta problemas de infraestructura, burocracia, logística y almacenamiento que limitan su desempeño, principalmente mirando a las exportaciones.
La cosecha de granos 2016-2017 presenta un récord, según la estatal Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), que en el mes de mayo contabilizó 232 millones de toneladas, un aumento del 24 % frente a mayo del año pasado, reseñó Efe.
Además de eso, la agroindustria generó 14.648 puestos formales de trabajo en abril, según el Registro General de Empleados y Desempleados (Caged), divulgado por el Ministerio del Trabajo.
Este último número mejoró las expectativas de una lenta retomada de la generación de empleos en el país con más de catorce millones de personas desempleadas, el equivalente al 13,7 % de la población, de acuerdo con datos del IBGE.
