El aumento de las tensiones comerciales, que ha iniciado EEUU, pueden ralentizar el crecimiento económico global al afectar las inversiones y el consumo en todo el mundo, según se desprende de un artículo del último boletín económico del Banco Central Europeo (BCE).
El personal del BCE advierte de que “una escalada significativa del riesgo de tensiones comerciales puede arruinar la recuperación actual del comercio global y de la actividad económica”.
Si EEUU aumenta los aranceles a las importaciones de forma significativa, sería negativo para la economía mundial, pero sobre todo para la economía estadounidense, según el artículo.
Los países con las relaciones comerciales más estrechas con EEUU serían los más afectados.
En caso de un aumento generalizado de los aranceles, los precios de importación más elevados podrían incrementar los costes de producción de las empresas y reducir el poder adquisitivo de los hogares, reporta Efe.
Las tensiones comerciales pueden incrementar la incertidumbre económica y hacer que las empresas pospongan sus inversiones y los hogares el gasto.