Colombia, el primer abastecedor mundial de café arábigo lavado, pidió este martes un precio base internacional de 2 dólares por libra para que los productores puedan tener un ingreso digno que les evite pérdidas y abandonar la industria.
Los productores colombianos de café han enfrentado una crisis en los últimos meses por los bajos precios internacionales, ante lo que el gobierno destinó recursos por 79,5 millones de dólares en subsidios, alivio de deudas y renovación de cafetales para compensarlos.
“¿Es justo el comercio cuando alguien compra su producto por debajo del costo de producción?”, dijo el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez, en la reunión de la Conferencia Anual de Comercio Justo (Fairtrade International), en Bonn, Alemania.
De acuerdo con un comunicado de la Federación Nacional de Cafeteros, Vélez recordó en la reunión que el precio internacional del café alcanzó hace unos días un mínimo de 88 centavos de dólar por libra, cotización que no se registraba desde hace más de una década, lo que pone en riesgo la sostenibilidad y la producción mundial del grano.
La libra de café en la Bolsa de Nueva York cerró el martes en 1,09 dólar por libra.
El dirigente planteó en febrero una posible desvinculación del precio de referencia de Nueva York a otros productores de arábiga de alta calidad en un esfuerzo por vender café por encima de los costos de producción, pero en el mercado aseguran que ese movimiento podría generar la búsqueda de nuevos suministros.
El precio interno que reciben actualmente los productores de café en Colombia por cada carga de 125 kilos es de 815.000 pesos (254 dólares), un precio que apenas cubre los costos de producción estimados en 780.000 pesos (243 dólares). En los últimos meses los precios no cubrieron los costos de producción.
En los últimos 18 meses Colombia perdió 400.000 hectáreas de café por la decisión de los caficultores de abandonar la industria debido a los bajos precios. El país cuenta ahora con 880.000 hectáreas de las que dependen unas 540.000 familias, informa Reuters.
Colombia, el tercer productor mundial de café después de Brasil y Vietnam, espera una producción de 14 millones de sacos de 60 kilos en 2019, por encima de los 13,6 millones de sacos del año pasado, debido a un aumento de la productividad a partir de la renovación y la fertilización.
