Las clínicas de reproducción asistida ofrecen tratamientos cada vez más precisos y personalizados, permitiendo a quienes desean ser padres esquivar su reloj biológico y postergar por un tiempo la llegada de los hijos.
“Nueve de cada diez pacientes logran el embarazo”, cuenta a Efe el biólogo Abel Avilés, de la clínica de reproducción asistida Ivinsemer.
Este éxito comporta una tranquilidad para personas cuyo plan de vida se aleja de los biorritmos impuestos tanto por la tradición familiar como por la propia naturaleza animal.
“Las parejas hoy en día buscan estudiar más, buscan tener un futuro económico mejor asegurado y eso los lleva, a veces, a postergar la maternidad”, explica el doctor Mario Cristo.
La posibilidad de congelar óvulos a una edad prudencial permite mantener intactas “las características biológicas” del momento para cuando se desee proceder a la fecundación.
“Eso se traduce en un embarazo más exitoso”, señala Cristo, quien si bien considera posible “postergar la maternidad”, recomienda prudencia y “la valoración de un especialista en fertilidad”.
Hacer saber “que existen este tipo de opciones” es esencial para que la gente “planifique su futuro en función de eso”, apunta.
El problema de la infertilidad no siempre reside en una cuestión de edad, escollo que cada día se sortea con mayor facilidad.
Cerca de 40 % de la infertilidad corresponde a problemas femeninos, mientras que otro 40 % es relativo al hombre, cuenta Avilés, quien añade que el 20 % restante obedece a razones ignotas, reseñó Efe.
Sin embargo, a partir de los 35 años la fertilidad merma en ambos sexos y comienzan a acrecentarse los riesgos.
Mayra Altamirano personifica el desafío al reloj biológico. Padece salpingoclasia y necesitó un año de tratamiento atestado de pruebas para, dos transferencias después, quedar embarazada a los 44 años.
La futura madre dice a Efe que pensó que “las posibilidades serían nulas”, debido a su diagnóstico y su edad.
La paciente considera que su edad le permite ahora estar mejor preparada psicológicamente para la maternidad y que en estos casos los bebés son “planeados y muy deseados”.