Al menos 6.000 habitantes de un caserío en el departamento de Antioquia están en riesgo por acciones de la banda criminal Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), heredera de los desmovilizados grupos paramilitares, denunció la Defensoría del Pueblo.
“Encontré una comunidad con miedo, preocupada por la problemática de los derechos humanos”, afirmó el defensor del pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, en un comunicado en el que da cuenta de una visita que hizo al caserío de San José de Apartadó.
El defensor detalló que “son por lo menos 6.000 habitantes los que corren riesgo por la presencia de hombres del grupo armado ilegal en esa región, debido a la restricción de la movilidad, ubicación de retenes y puestos de control, así como el hallazgo de minas antipersonales”.
El informe de riesgo de la Defensoría advirtió que integrantes de las AGC ofrecen desde 600.000 pesos a dos millones de pesos mensuales (entre 200,2 y 667,5 dólares) a jóvenes de entre 17 y 26 años para reclutarlos y obligarlos a cometer delitos como narcotráfico y tráfico de armas.
“A esta situación se suma que en las zonas donde existe mayor presencia de las AGC (…) se ha verificado el aumento de casos de violencia sexual y de género”, agregó el defensor.
El funcionario indicó que entre las organizaciones amenazadas están la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, la Asociación Campesina de San José de Apartadó (Acasa), el Partido Político Unión Patriótica y el Movimiento Marcha Patriótica, reseñó Efe.
Además, el Comité de y para los Derechos Humanos de San José de Apartadó, las Juntas de Acción Comunal y acompañantes humanitarios internacionales de defensoras y defensores de derechos humanos.
