El drama de los miles de migrantes que en su camino hacia Norteamérica cruzan la peligrosa selva del Darién, frontera natural entre Panamá y Colombia, centra una muestra inaugurada este jueves con obras del fotógrafo de Efe en el país centroamericano, Bienvenido Velasco, y de su colega panameño Mauricio Valenzuela.
“Wadada (camino en somalí) El camino de la migración en Darién” estará abierta hasta el 3 de octubre próximo en Ciudad Del Saber, el emporio que alberga las oficinas regionales de las Naciones Unidas situado a las afueras de Ciudad de Panamá.
Organizada por la Fundación Punto Inicial-Plataforma Cultura de Panamá, la muestra pretende “generar reflexión y diálogo entre la sociedad panameña para dar más visibilidad a la situación que se vive” con los migrantes en la frontera sur panameña, explicó a Efe el representante de la ONG, Roger Vásquez.
Las imágenes retratan la dura situación de los migrantes, personas de todas las edades, familias enteras, que proceden de países caribeños, africanos, asiáticos y suramericanos y cruzan la frontera entre Colombia y Panamá con la intención de llegar a Estados Unidos.
Miles de esos migrantes pasan por poblados indígenas panameños como Peñitas, donde se han levantado albergues temporales muy básicos donde hacen una parada para luego seguir su largo camino.
Velasco comentó que cree que este tipo de exposiciones “de alguna manera le abren los ojos a los que nunca han migrado ni arriesgo su vida por un futuro mejor”.
“Esta es una pequeña muestra mía de toda la ola de migrantes que viene del sur. He tenido la oportunidad y la responsabilidad de retratar una parte de esa aventura que han emprendido”, añadió el fotógrafo de Efe en Panamá.
Valenzuela comentó a Efe por su parte que la primera vez que fue a Peñita sabía qué exactamente iba a encontrar: “Éramos conscientes de que había migrantes, pero no así. Sentí que estábamos en otro país, en otro continente. Había gente durmiendo en el suelo, en tiendas de campañas… habían niños en condiciones fuertes salud. Hablar con la gente era lo más traumático”.
La selva del Darién es el único punto del continente donde se interrumpe la carretera Panamericana, que recorre América de norte a sur. Es surcada por el narcotráfico y el crimen organizado, lo que la convierte en un paso en muchos mortal para los migrantes.
“Con nuestra lente y visión captamos durante nuestros viajes a Darién las diferentes peripecias a las que se enfrentan estas personas en una semana de camino en el tapón de Darién: robos, violaciones, enfermedades y, más frecuente de lo que retratan las cifras oficiales, la muerte. Los afortunados que emergen, usualmente han dejado o perdido todo en la ruta”, expresan los fotógrafos en una declaración pública. EFE