El escándalo de dopaje de Estado en Rusia, que le puede dejar fuera de los Juegos de Invierno del próximo año, se coló de lleno en el sorteo del Mundial que se celebrará en el Palacio del Kremlin.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y el jefe de la Unión de Fútbol de Rusia, Vitali Mutkó, fueron acribillados a preguntas sobre dopaje, por lo que el fútbol y el sorteo se vieron relegados a un segundo lugar.
“Declaro que estoy dispuesto a comparecer ante cualquier tribunal y demostrar que en Rusia no hubo y no hay ningún programa de apoyo al dopaje. ¡No lo necesitamos! ¿Qué pasa que Rusia inventó el dopaje?”, dijo Mutkó, en respuesta a la prensa estadounidense.
Mutkó criticó a medios como el “New York Times” por convertirse en portavoces del Comité Olímpico Internacional (COI) al anunciar de antemano las decisiones en contra de Rusia, reporta Efe.
“Por ejemplo, ahora usted dice que nuestra selección será excluida al completo. ¿Usted ya conoce la decisión? Los castigos colectivos se han convertido en una costumbre demasiado popular”, aseguró.
Recordó que después de que esa cabecera publicara hace unos días el diario del antiguo director del laboratorio antidopaje de Moscú, Grigori Rodchenkov, el hombre que denunció el dopaje de Estado en Rusia, Mutkó ofreció una entrevista al rotativo.