Cerca de 200.000 trabajadores del sector floricultor de Colombia alistan los últimos despachos de rosas, girasoles y orquídeas para atender el Día de San Valentín en medio de una creciente demanda en época de pandemia.
Según expertos, el brote de COVID-19 permitió que las exportaciones de flores se dispararan un 22% en 2022 en países como Estados Unidos y Holanda, comercializando más de 300.000 toneladas y 1.727 millones de dólares.
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Los empresarios confían en que la tendencia se mantenga este año, debido al cambio de hábitos por parte de las personas que aún trabajan o estudian desde sus hogares.
“Resulta que con la pandemia, al quedarse las personas en las casas hizo que encontraran en las flores el impacto emocional que ellas tienen, una compañía, una ayuda para sobrellevar el encierro, algo para la salud mental”
Mencionó Augusto Solano, presidente de Asocolflores para Reuters.
El sector floricultor colombiano ocupa un poco más de 8.000 hectáreas para abastecer a cerca de 100 países y representa un amplio sector que permite el desarrollo humano, generando en promedio 14 empleos por hectárea, muy por encima de la media de los demás sectores agrícolas, que están alrededor de dos empleos por hectárea.
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