El general en retiro Rito Alejo del Río, quien cumple una condena de 25 años de cárcel por el asesinato de un campesino en Colombia, anunció que se someterá a la Justicia Especial para la Paz (JEP), que forma parte del acuerdo entre el Gobierno y las FARC.
Del Río está acusado de la muerte del campesino Marino López Mena, ocurrida el 27 de febrero de 1997 en el municipio de Bijao, en el departamento de Chocó.
De acuerdo con el expediente judicial, el general se alió con grupos paramilitares durante el tiempo que estuvo a cargo de la Brigada XVII del Ejército Nacional, con sede en Urabá, también en el noroeste del país.
Además es uno de los primeros condenados por el escándalo de los llamados “falsos positivos”, en donde civiles fueron presentados por militares como guerrilleros muertos en combate para obtener beneficios.
Rito Alejo del Río es investigado también por los asesinatos del periodista y humorista Jaime Garzón en 1999 y del excandidato presidencial Álvaro Gómez Hurtado en 1995, así como por la masacre de Mapiripán, en la que murieron al menos 50 personas en 1997.
Con la decisión de este miércoles, Rito Alejo del Río se convierte en uno de los primeros altos oficiales de las Fuerzas Militares colombianas en acogerse a la JEP, encargada de juzgar los crímenes que se cometieron en el conflicto armado en el país.
Las sanciones contempladas en la JEP son de cinco a ocho años de restricción efectiva de la libertad para quienes acepten su responsabilidad, informa Efe.
Las sanciones ordinarias, de 15 a 20 años de cárcel, las recibirán quienes no admitan responsabilidad y sean condenados por el Tribunal para la Paz.