La compañía estadounidense United Airlines anunció este viernes que ha tomado medidas para ejercer sus derechos sobre la colombiana Avianca Holdings, lo que implica un cambio en la junta directiva de la empresa.
“Hoy tomamos medidas para fortalecer nuestra alianza con Avianca y dar a la administración y a los colaboradores de esta compañía la mejor oportunidad de éxito”, manifestó United en un comunicado.
Esta decisión implica un mayor control de United sobre Avianca con base en el préstamo de 456 millones de dólares que la compañía estadounidense hizo en noviembre pasado a una empresa del grupo Sinergy, accionista mayoritario de Avianca Holdings, y en la cual se dieron como garantía las acciones de éste en la aerolínea colombiana.
El grupo Sinergy es controlado por el empresario brasileño Germán Efromovich, presidente de Avianca Holdings, de la cual, sin embargo, no hace parte la aerolínea Avianca Brasil a la que el Gobierno de ese país le suspendió cautelarmente hoy viernes “todas las operaciones” tras declararse en bancarrota, cancelar más de 1.000 vuelos y poner en venta sus activos.
Con la decisión anunciada hoy por United, la compañía estadounidense debilita la posición de Efromovich en la empresa y fortalece a Kingskand Holdings, segundo accionista de Avianca Holdings y presidida por Roberto Kriete, empresario salvadoreño del Grupo Taca.
Avianca Holdings está integrada por las aerolíneas Avianca y Tampa Cargo (Colombia), Aerogal (Ecuador) y las compañías del Grupo Taca Internacional Airlines basadas en Centroamérica y Perú.
El préstamo de 456 millones de dólares hecho a BRW Aviation, empresa del grupo Sinergy, está al margen de una alianza comercial que hace seis meses firmaron United, Avianca y la panameña Copa Airlines, todas socias de Star Alliance.
La compañía estadounidense agregó: “Llevar a cabo esta acción hace parte de nuestros derechos en el marco del acuerdo, los cuales fueron claramente explicados en nuestro contrato”.
La difícil situación financiera de Avianca Holdings se hizo evidente con un “plan de transformación” puesto en marcha en los últimos meses por la compañía.
Como parte de ese plan, canceló el pasado 15 de marzo una orden de compra a Airbus de 17 aviones A320Neo y aplazó la incorporación a su flota de otros 35 del mismo modelo con el fin de mejorar su flujo de caja para los próximos tres años.
Una semana después, Avianca suprimió varias rutas internacionales, entre ellas las de Bogotá a Boston y Chicago (EE.UU.), esta última abierta hace menos de un año, así como otras con origen en Centroamérica.
El 24 de abril, el presidente de Avianca Holdings, Hernán Rincón, presentó la renuncia al cargo que ocupaba desde hace tres años y la compañía designó como encargado al vicepresidente legal, Renato Covelo.
Finalmente, el pasado 13 de mayo la agencia de calificación de riesgo Standard & Poor’s (S&P) rebajó la nota de Avianca Holdings de “B” a “CCC+” y la perspectiva pasó de “estable” a “negativa” por la demora en el proceso de refinanciación de sus bonos sénior no garantizados de 550 millones de dólares. Efe