La enfermedad de Hungtinton la causa la mutación en un solo gen y, aunque esto se sabe desde 1993, aún no se entiende bien el mecanismo que la provoca. Ahora, científicos han logrado imágenes “muy realistas” en 3D de una célula dañada que dan nuevas pistas sobre este trastorno neurodegenerativo.
La descripción de estas imágenes, para las que se ha usado tecnología de microscopía electrónica de última generación, se publica en un artículo en la revista Cell y, según sus autores, ayudará a avanzar en el conocimiento de esta enfermedad rara hereditaria.
La enfermedad de Hungtinton está causada por la mutación en el gen que codifica la proteína hungtintina, explicó a Efe Rubén Fernández Busnadiego, líder de grupo en el Instituto Max Planck de Bioquímica, en Martinsried (Alemania), y coordinador de este trabajo, quien señaló que, si bien han pasado casi 25 años desde que se descubrió, “aún no entendemos el mecanismo de la enfermedad”.
Para que las proteínas puedan llevar a cabo sus funciones tienen que adoptar una forma determinada: pasan por un proceso de plegamiento para construir después su correcta forma tridimensional.
Si la proteína no lo hace o en el curso de su vida dentro de la célula pierde esta forma, dejará de realizar su función.
En las células sanas hay mecanismos de “control de calidad celular” que deshacen las proteínas no funcionales y las reciclan en aminoácidos para construir nuevas, pero en las enfermedades neurodegenerativas “algo falla”: hay proteínas que no alcanzan su forma tridimensional y no hay una vía para echarlas de las células.
Estas proteínas que no sirven van formando unas estructuras macroscópicas, los depósitos de proteínas agregadas, comunes y similares en enfermedades como alzhéimer, párkinson o huntington.
En el caso del huntington, es la mutación en el gen de la hungtintina el que precisamente no permite que la proteína adquiera su forma tridimensional y por tanto se agrega, señaló Fernández.
Las consecuencias que esto tiene para las células no se entienden aún en su totalidad, de ahí la necesidad de estudiar el interior de la célula: “por primera vez hemos logrado, con microscopía electrónica de última generación, imágenes en 3D de muy alta resolución de estos agregados dentro de las células”.
Hasta ahora, se habían estudiado estos agregados de proteínas fuera del contexto celular, pero “Por primera vez hemos visto estos agregados dentro de la célula y en alta resolución, lo que nos da una visión más realista”.
Las imágenes han hecho que los investigadores constaten que los citados depósitos de proteínas son como “ovillos de fibra” y que estas fibras parece se pegan -perjudicándolas- a las membranas del retículo endoplasmático, una red que se extiende a lo largo de toda la célula y que tiene funciones fundamentales como la síntesis de lípidos y proteínas o la exportación de proteínas a otros orgánulos, informa Efe.
Esta es una investigación básica que da un paso más en el conocimiento de la enfermedad para la que aún no hay cura, recalcó el investigador español, quien concluyó: “nosotros proponemos un nuevo mecanismo por el que los agregados empeoran la salud de la célula y este mecanismo puede tener relevancia química para futuras ideas terapéuticas, aunque aún es pronto para saberlo”.