Foto: Anadolu
Investigadores de la Universidad de los Andes en Bogotá se unieron con la empresa Multinsa, de Barrancabermeja, para desarrollar un desinfectante de superficies que, mediante nanotecnología, puede ayudar a combatir el coronavirus.
El producto usa nanotecnología para adherirse a las superficies por más de 72 horas, incluidos diferentes textiles como los que se usan para las batas antifluidos, los principales elementos de protección que usan los médicos en la primera línea de combate contra el virus.
Johann F. Osma es profesor asociado del Departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la Universidad de los Andes y líder del proyecto. El investigador le contó a la Agencia Anadolu que cuando se propusieron desarrollar el desinfectante, el reto era “crear una formulación que se quedara por más tiempo en las superficies”.
El investigador lleva unos 15 años desarrollando nanocompuestos para el sector industrial y esa experiencia lo ayudó a abordar más rápido los desafíos que implicaba el proyecto.
El proceso inició en Semana Santa, cuando Multinsa le propuso al profesor codesarrollar un nuevo desinfectante que tuviera unas propiedades superiores a los demás que están disponibles en el mercado. Para entonces, el coronavirus ya causaba estragos en Europa y se empezaban a registrar los primeros casos en América Latina.
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El desafío requería unir diferentes conocimientos. El experto convocó a ingenieros ambientales, biomédicos, electrónicos, microbiólogos, químicos, entre otros profesionales. Ese trabajo en equipo fue clave para desarrollar el producto rápido, en un proceso que además se tuvo que desarrollar mientras Bogotá y el país entero implementaban restricciones a la movilidad, al uso de laboratorios y al movimiento de materiales para evitar el aumento masivo de contagios de coronavirus.
Aún con todos esos desafíos, el grupo logró desarrollar un prototipo rápidamente y luego empezaron las pruebas. Tras lograr que el líquido fuera efectivo contra virus, bacterias y hongos, llegó la etapa de ajustar la fórmula para se quedara en las superficies por más tiempo.
Al principio los investigadores tenían la meta de que el desinfectante durara 24 horas sobre las superficies, pero al hacer las pruebas iniciales, se dieron cuenta de que, con algunos ajustes, podría durar mucho más. El secreto para lograrlo fue usar la nanoteconología, es decir, la manipulación de átomos y moléculas.