La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que ha pasado a “fase de emergencia total” ante la epidemia de cólera en Yemen, con más 100.000 casos sospechosos y cerca de 800 fallecidos, y evalúa las posibilidades de llevar a cabo una campaña de vacunación para contener su propagación.
Con el fin de identificar las áreas más afectadas, determinar cuánta gente debería ser vacunada y poner en marcha los preparativos logísticos, la Organización ha iniciado conversaciones con las autoridades yemeníes y entidades humanitarias que trabajan en el país.
La OMS gestiona una reserva de dos millones de dosis de vacunas contra el cólera.
“Todo esto es un desafío porque se trata de un país en guerra, pero la buena noticia es que varias de las zonas más afectadas son accesibles y actualmente podemos llegar a la gente con suministros médicos, fluidos rehidratantes y antibióticos, lo que hace posible una campaña de vacunación”, dijo en Ginebra la portavoz de la OMS, Fadela Chaib.
La Organización debe asegurarse ahora de que si envía las vacunas a Yemen exista la capacidad de almacenamiento necesaria, que funcione la cadena de frío para la conservación del producto y que las personas que se encargarán de la vacunación cuenten con la formación apropiada.
La epidemia de cólera se ha extendido desde el pasado abril a la mayor parte de las provincias de Yemen, donde las infraestructuras están dañadas por la guerra civil.
El conflicto enfrenta a fuerzas gubernamentales -apoyadas por una coalición árabe, que a la vez es respaldada por Estados Unidos- y a los rebeldes hutíes.