El trabajo conjunto de médicos, biólogos moleculares, informáticos y especialistas en genética y genómica, sinergia conocida como “crossfuncionalidad”, es una forma de avanzar en la búsqueda de la cura del cáncer y resolver algunos los desafíos cotidianos que presenta la ciencia médica.
En una entrevista con Efe, el doctor Daniel Ciriano, director médico de Roche Latinoamérica, explica que esa metodología de trabajo da buenos resultados y logra soluciones innovadoras para combatir el cáncer. Efe
El éxito radica en “esa relación del ingeniero que diseña una máquina que nos permite hacer un diagnóstico con un experto en genómica, que por otro lado necesita de un informático que haga los ‘arrays’ (mapas de datos), para hacer la secuenciación y la perfilación genómica”, señala el especialista.
“Si no se trabaja así hoy en día no se avanza”, agrega Ciriano, que hoy presenta una ponencia en el foro Roche Press Day que reúne en Buenos Aires a expertos de la región para intercambiar experiencias y difundir los avances en el control de enfermedades como el cáncer.
Según informes de la Organización Panamericana de la Salud, el cáncer es la segunda causa de muerte en la región, sólo por detrás de las afecciones cardiovasculares.
Se calcula que más de 17 millones de personas morirán de cáncer en 2030. Para ese año se espera también que 80 millones de personas en el mundo vivirán con la enfermedad.
Ciriano explicó que el cáncer es una enfermedad “genética, heterogénea y personal”, ya que se manifiesta en forma particular en cada paciente.
Por eso, quedó atrás el tiempo en que cada institución o miembro de la academia trabajaba en solitario.
“Hacemos acuerdos con instituciones en diferentes universidades e institutos alrededor del mundo, teniendo contacto o cercanía con científicos que trabajan en pequeñas o medianas empresas biotecnológicas”, detalla Ciriano.
Todo ese intercambio de experiencias y conocimientos sirven para conocer cuáles son los condicionantes de las enfermedades y entender por qué ocurren.
“Sabemos que a veces son condicionantes genéticos, genómicos, a veces tiene que ver con el mal funcionamiento de sistemas encimáticos, que son aquellos sistemas de señales que utilizan las células para hacer funciones internas o comunicarse entre ellas”, abunda el director médico de Roche.
La farmacéutica cuenta con más de 80 años de presencia en la región y es líder mundial en medicamentos oncológicos.
Los especialistas centran sus esfuerzos en “entender los procesos celulares involucrados el desarrollo de la enfermedad”. También en producir plataformas de desarrollo de medicamentos que permiten diseñarlos a medida.
“Hoy se busca la personalización de los tratamientos, lo que redunda en eficacia y mejores resultados”, aclara Ciriano, de profesión neurocirujano.
“Intervenimos en pequeñas moléculas, en productos biológicos, que permiten actuar, modular, interferir con los mecanismos de acción íntimos que estamos conociendo cada vez mejor”, especifica.
El experto dice que otro factor a considerar en la lucha contra el cáncer es que “cada individuo reacciona de una manera diferente” respecto a un “grupo de células que escapa de los controles habituales, que se disemina indiscriminadamente por el organismo”.
Por eso es que el desarrollo de soluciones terapéuticas para el cáncer es muy diverso.
“Estamos yendo a terapias combinadas que por un lado apuntan a blancos biológicos y por otro lado refuerzan la inmunidad del paciente”, aclara.
El doctor añadió que el cáncer “no es una enfermedad, el cáncer son más de 200 enfermedades”, de ahí la complejidad para generar tratamientos eficaces.
Además, es necesaria la colaboración estrecha con los diferentes actores de los sistemas de salud de los países latinoamericanos para “ser parte de la solución”.
Para el experto hay motivos para ser optimistas sin dejar de ver que “todavía hay un enorme camino por recorrer”.
La sexta edición del Roche Press Day culminará mañana con la entrega del Premio Roche de Periodismo en Salud, que se otorga desde 2013 de manera conjunta con la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) a los mejores trabajos de divulgación científica en la región.